Las autoridades búlgaras extraditaron a un ciudadano británico buscado por la Interpol por diecinueve violaciones a varones jóvenes y otros delitos sexuales, informó hoy la oficina de prensa del ministerio del Interior del país balcánico.
El británico, de 57 años y cuyo nombre no ha sido revelado, fue detenido el 22 de julio en el puesto de control fronterizo de Kapitan Andreevo, en la frontera con Turquía, y entregado al día siguiente a las autoridades británicas.
El hombre era buscado por una serie de delitos contra varones jóvenes entre los que hay diecinueve violaciones, un caso de violencia sexual y cuatro casos de incitación a actos sexuales con la participación de menores. La ley británica prevé la pena de cadena perpetua para acusaciones como las formuladas contra el detenido.