Esta rabia
Opinión
Este hombre anciano que viene subiendo la calle con los pasos contados, como si los estuviera andando de nuevo. Ayer lo volví a ver. Desde el puente de La Catorce hasta La Fuente no es mucho camino si a uno le responden bien las piernas. Pero él camina de un solo pie y una muleta hace las veces de su otra pierna pero que, al menos, se deja arrastrar sin resistencia. Nunca supe de dónde venía, ni por qué siempre era a la misma hora cuando lo miraba subiendo la cuesta a duras penas, lentamente como quien carga una cosa ...